Una manera rápida y sencilla de poder ahorrar hasta un 40% en gasolina es cambiando los hábitos de manejo y mantenimiento del vehículo...
Una
manera rápida y sencilla de poder ahorrar hasta un 40% en gasolina es
cambiando los hábitos de manejo y mantenimiento del vehículo. A
continuación se detallan algunas sugerencias:
Evite mantener el auto encendido:
Calentar
el carro antes de salir y dejarlo encendido por más de 30 segundos es
un gasto innecesario de combustible. Los carros modernos alcanzan
temperaturas óptimas si se encienden y arrancan inmediatamente.
No maneje agresivamente:
El
manejo agresivo es uno de los grandes culpables a la hora de economizar
combustible. Con tan sólo reducir 10 millas por hora en la carretera se
puede ahorrar un 15 por ciento de consumo de gasolina.
Uso excesivo del aire acondicionado:
Ahorrar
en combustible puede ser tan sencillo como bajar un poco el aire
acondicionado, manteniendo la cabina en una temperatura cómoda. Intente
estacionarse en la sombra, para que la cabina no se caliente tanto
cuando el carro está estacionado. Si la temperatura de la cabina es
superior a la temperatura exterior, abra las ventanas para permitir que
el calor salga en lugar de encender el aire acondicionado
inmediatamente.
Presión incorrecta de las gomas:
La
presión correcta de las gomas es crítica para la seguridad y un factor
clave en la optimización de la economía de combustible. Tener la
presión incorrecta, aumenta la resistencia al rodar, lo cual le exige al
motor trabajar más duro para moverlas y gastar más gasolina.
Filtro de aire sucio:
Un
filtro de aire sucio puede tener un impacto significativo en la
economía de combustible. Como una persona que sufre de un ataque de
asma, el filtro sucio impide que el motor respire apropiadamente. Para
compensar por el flujo restringido de aire, el motor consume más
combustible para enviar la misma cantidad de energía. Antes de realizar
viajes largos y cambie el filtro del aire.
Carga no balanceada:
La
resistencia aerodinámica es una medida de cuán fuerte el viento empuja a
un vehículo en movimiento. A medida que la resistencia aumenta, igual
ocurre con el consumo de combustible que se requiere para mantener la
velocidad constante. Evite cualquier cosa que aumente la resistencia al
viento, como la carga colocada en el techo. Como regla general, si la
carga adicional aumenta el ruido del viento dentro del vehículo, de
igual manera está aumentando su consumo de combustible.