Por Daygorod Fabián Sánchez El Autor es educador y Comunicador Social Fruto de los convenios antidemocráticos, formalizados...
Por Daygorod Fabián Sánchez
El Autor es educador y Comunicador Social
Fruto
de los convenios antidemocráticos, formalizados entre los principales partidos
de nuestro sistema indigentemente liberal muchos de los Alcaldes Electos no
tienen una conexión real con la población y mucho menos con ideológicas políticas
que motivaran sus candidaturas. De ahí que el deseo irrefrenable de obtener
riquezas, a cualquier costo, ha llevado a los Intendentes a realizar actos que
infringen la ley sin ningún tipo de temor.
La
prueba de esto lo contempla el informe realizado por el SISMAP Municipal
(Sistema de Monitoreo a la Administración Municipal) el cual arroja datos
escalofriantes como por ejemplo que en la Zona Norte de este país el 52% de los
Ayuntamientos entregó presupuestos anuales, los demás no entregaron postulados económicos
anualizados. Aunque también este informe detalla que esos mismos que entregaron
los presupuestos anuales, no entregaron los informes trimestrales y en la mayoría
de los casos no reportaron nada que arrojara evidencia de cómo se ejecutó el
dinero otorgado por el Estado Dominicano….
…Posibles Causas de Orden Político y Educacional.
La
inmensa mayoría de los que resultaron seleccionados fueron producto de un
señalamiento por lo que además de la inconstitucionalidad existente, también está
presente el poco compromiso partidario y poblacional de estos Alcaldes. El transfuguismo
ha sido la práctica dominante en estos casos, cuando se supone que los
regidores de carácter opositor (aunque también sin ideología) deben ser el
contrapeso o la voz disidente en los cabildos, estos ha creado alianzas con los
oficialistas para poder beneficiarse de la piñata Municipal.
La
práctica es simple ejecutar obras, sobrevaluarlas y de ahí se saca la tajada. Lo
impactante es que esta práctica y vida municipal vigente todos los días la
practican casi todos los litorales (opositores y oficialistas) sin que los munícipes
se quejen de forma alguna. Como lo antes indicado es violatorio a las leyes que
se supone deben aplicar los organismos encargados de las cuentas del país,
incluyendo los Ayuntamientos, cada día se pierde la esperanza de que la ley sea
ley y se aplique como ley.