Daygorod Fabian El Autor es Educador y Comunicador Social El tema del poder es materia de discusión desde la antigüedad. El quere...
Daygorod Fabian
El Autor es Educador y Comunicador Social
El
tema del poder es materia de discusión desde la antigüedad. El querer alcanzar
el poder, desde todos los ángulos posibles de ver, es un anhelo que está incrustado
en el corazón y mente de los hombres. En esta ocasión quiero limitarme a ver
las bases del poder, su sustento y como se ha hecho un ejercicio retorcido del
mismo bajo los mandos Peledeistas.
Según
Josep Redorta (Autor del Libro El Poder y sus Conflictos) el poder tiene cuatro
ejes fundamentales: Personalidad, Propiedad, Organización y Conocimiento. Con estos
criterios otros autores pasados y presentes están totalmente de acuerdo, puedo
mencionar a J.K. Galbraith (1983) y M.
Castells (1999), los cuales expresan en sus escritos su coordinación con el
pensamiento de Redorta.
Decía
Napoleón Bonaparte que la persona con Carisma tiene sus propios recursos, deslindando
así el carisma como una base asombrosa de poder. Muchos de los personajes que exhibe
el PLD dentro sus filas, no han obtenido el poder legítimo de las candidaturas
y posteriormente su elección popular en base al carisma, ni a la ideología y
mucho menos con la plataforma del conocimiento ¡Sino en base al dinero!....
….El Poder del Dinero:
usos retorcidos
Como
los ideales de Bosch, de Peña y hasta del mismo Balaguer no están presentes hoy
día en las filas de los partidos el dinero se ha constituido, erradamente, en el
sustituto de la ideología, del carisma, del conocimiento y de la organización. En
este error han caído los que han fundamentado sus ascensos partidarios mediante
la compra de voluntades y colocándole precio a las palabras y valor a los silencios.
Es
precisamente ese el motivo de que cuando se reditúa la moral, esta adquiere un
valor sublime, en las filas del partido oficial, pero este también es el motivo
que está llevando al PLD a la barranca dónde hoy se encuentra. La casta político
– económica que registra el control del PLD, que no es el Comité Político,
piensa que sus tácticas son eternas, pero su periodo de tiempo está muy cercano
al fin.