Por Daygorod Fabián El Autor es Educador y Comunicador Social El tema Venezolano debe preocuparnos a nosotros, pues tenemos lasos...
Por Daygorod Fabián
El Autor es Educador y Comunicador Social
El tema Venezolano
debe preocuparnos a nosotros, pues tenemos lasos históricos y de hermandad que
nos unen con este pueblo, que aunque hoy sufre, ha sido un gran aliado y
solidario vecino en momentos difíciles de nuestro trayecto hacia la democracia.
Debo decir que
la crisis debe ser dividida en tres bloques, los cuales detallaré, de forma
breve en lo relativo a este artículo;
Crisis Económica: Dígase lo que se diga
Maduro no es Chávez, por lo que el proyecto socialista que Chávez intentó
exportar hacia los demás países, con Maduro se terminó encerrando sólo en la
misma Venezuela. En lo particular no soy crítico del Socialismo, pero sí de la
forma en que es interpretado por el Señor Maduro.
Desde el año
2012 e inicios del 2013 el sector inmobiliario Venezolano se ha visto afectado
a causa de factores intrínsecos, entre estos señalamos: falta de financiación, inflación,
escasez y sobreprecio de materiales de construcción. Esto se ha agudizado por
la interpretación que ha hecho el fallecido Chavismo de lo que es el Socialismo,
eliminando de forma radical la propiedad privada y estandarizando, sin escala,
la distribución de productos que antes eran no estatales.
Escasez: La iliquidez en Venezuela es
un fenómeno que ha afectado a la economía de esa nación. Se ha generado una crisis
humanitaria sin precedentes en la historia. Es curioso que esta situación se dé
en productos con precios regulados, como alimentos, leche, diversos tipos de
carne especialmente el pollo. Además está gravemente afectado el café, arroz,
aceite, harina pre-cocida, mantequilla, entre otros.
Otros productos
que se ven afectados por esta crisis son los de primera necesidad: papel higiénico, jabón,
pasta dental, medicinas, etc.
Crisis política y Separación de Poderes: El
20 de octubre de 2016, el Consejo Nacional Electoral (CNE) Venezolano aturdió,
sin alegados de carácter jurídico, sino meramente dictatoriales, la recolección
de las firmas que correspondían al 20 por ciento de los inscritos en el
Registro Electoral Nacional Venezolano (RENV) para solicitar el referéndum
revocatorio contra el mandato del presidente, que había cumplido el 50% de su
periodo.