Imagen tomada de http://poderydinero.mx Por.- Adam Almonte Parecería muy dura esta sentencia, pero en los últimos tiempo...
Imagen tomada de http://poderydinero.mx |
Por.- Adam Almonte
Parecería muy dura esta
sentencia, pero en los últimos tiempos he observado que se trata de una cruel realidad que se vive en nuestro país y en el
mundo, “nadie da nada a cambio de nada”, siendo el epicentro de esta afirmación
el sector político y empresarial.
Cuando observamos ciertos
personajes participando activamente en diferentes escenarios comunitarios,
gestionando y llevando ayudas, organizando eventos, y ser el epicentro de la opinión
pública, nos lleva al punto de desconfiar de su generosidad, porque, olvídense,
que tarde o temprano se “tira” como candidato para algún cargo de elección popular,
aunque, debo reconocer que no todos son así,
solo el 99% por no exagerar.
Esta falsa acción filantrópica no solo se ve en el escenario político dominicano,
sino también en escenarios internacionales, por poner un ejemplo de los muchos
que conozco, traeré a colación el mas reciente, el hombre más “rico” del mundo
(De dinero porque dudo que tenga algo más útil) el propietario de Amazon, Jeff Bezos, donó recientemente la suma de dos mil millones de dólares para los “pobres”, donación
esta que le permitirá pagar menos
impuestos.
La realidad es que estas personas “seudo filántropas” juegan con la
necesidad y las esperanzas de los más desfavorecidos, para obtener al final un
beneficio particular, ya sea económico, social o político, convirtiéndose en héroes
populares. Lo peor de todo esto, es que
la gente sabe y esta consiente que lo están cogiendo de pendejo, pero, ¿A quién no le gusta que le den? De lo que se
trata es que estas personas han descubierto que un alto porcentaje de la población
no hace nada por sí misma y esperan que
otro venga a resolverle su vida.
No obstante a esta realidad, debo
de reconocer que existe gente buena, de buen corazón, que se desprenden desinteresadamente
de lo que tienen para ayudar al prójimo, pero estas personas siempre se mantienen
en el anonimato.
De manera particular, considero que fomentar esta práctica (Seudo
Filantropia) obsoleta y clientelar, nos sumerge cada día más en el atraso y
dependencia de quienes dicen ser nuestros salvadores, aunque me tilden de
idealista y me crucifiquen como Jesús en la cruz o me digan que eso siempre ha
sido así, considero que las cosas deben cambiar y esto solo cambiará el día en que nosotros mismos cambiemos nuestra forma
de pensar, y siendo realista, no creo que es día este muy cerca, mientras tanto,
¡Que siga la fiesta!