La nueva ley contra ruidos aprobada en el Senado se aplicará a sus violadores en calles, avenidas, áreas residenciales, complejos hab...
La nueva ley contra ruidos aprobada en el Senado se aplicará a
sus violadores en calles, avenidas, áreas residenciales, complejos
habitacionales, condominios y en la proximidad de hospitales, colegios,
escuelas públicas y privadas e iglesias, que utilicen altoparlantes, vehículos
disco light y otros instrumentos para propaganda comercial, política o
religiosa; así como a casas particulares o negocios, por el uso de alarmas
residenciales, cuyos sonidos se prolonguen por más de 60 minutos, y plantas
eléctricas.
La iniciativa del senador de
Samaná, Prim Pujals Nolasco, establece sanciones para los violadores que van
desde tres a 30 salarios mínimos en el sector público. La pieza modifica la
actual Ley 287-04, sobre Prevención, Supresión y Limitación de Ruidos Nocivos y
Molestos que producen contaminación sonora.
La modificación incluyó
sanciones a colmadones, tiendas de licores, bares, clubes diurnos y nocturnos y
otros tipos de negocios o sitios privados, utilizando para ello bocinas, música
estruendosa, y otros implementos.